“Mucho PSOE por hacer” (alguno –y no sin razón, dada la condición de ex -dirigentes de los firmantes- ha rectificado el título para rebautizarlo como “Poco PSOE por deshacer”) es un documento de apoyo a Carme Chacón en el cual los autores se reafirman en el autobombo:
»Pese a la severa derrota, los y las socialistas tenemos motivos para reivindicar lo que hemos aportado a nuestro país durante los años de gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Quienes tanto pecaron con las manos (aplaudiendo, no se piensen otra cosa) tienen dificultades para hacer examen de conciencia, mostrar dolor de corazón y propósito de la enmienda. Quienes debiendo haber hablado –como era su derecho y su obligación- prefirieron el halago, ¿ahora van a rectificar el rumbo?
La verdad oficial –la de Chacón desde luego- sostiene que la culpa de todos los males que aquejan al PSOE la tiene en exclusiva la crisis. Y, claro, pedir responsabilidades a la crisis sería como pedírselas a la Naturaleza por un terremoto o una inundación. En otras palabras: se usa la crisis como pantalla para no asumir ni una sola responsabilidad. Por ejemplo, la que se deriva del disparatado del Estatuto catalán.
En estas condiciones es difícil que el PSOE aclare en su congreso qué lugar quiere ocupar en el mundo. Por ejemplo: ¿cuál es su posición respecto al espíritu y la letra de la Constitución (que incluye, claro está, los artículos 2 y 3)? A propósito, ¿qué piensa hacer el PSOE respecto al PSC: integrarlo en un proyecto nacional o dejarlo que siga campando por sus respetos? ¿A qué ciudadanos quiere representar el PSOE? ¿A la sociedad subvencionada o a la currante? ¿Qué quieren decir los líderes zapateristas cuando exigen ¡¡Que paguen los ricos!!? ¿Significa eso que va a pagar más el banquero que ellos acaban de indultar?
El PSOE haría bien en repintar sus blasones socialdemócratas, poniendo coto, de paso, a tantas ambiciones y a tantas prisas. Es hora ya de pensar en el futuro colectivo y no en el medro personal.